Saga: Las crónicas de Narnia #4
Autor: C.S. Lewis
Editorial: Destino
Precio: 12'95 euros
Páginas: 281
Formato: tapa dura
ISBN: 978-8408059288
Idioma: español
Fecha de publicación: 5 mayo 2005
Sinopsis:
Un príncipe lucha por su corona, al tiempo que descubre la verdadera historia de su pueblo, los telmarinos, unos auténticos piratas terrestres... Los Pevensie acuden a Narnia de nuevo para ayudar a un príncipe al que se ha negado el trono que legítimamente le corresponde. Caspian reúne un ejército para liberar a su país de un rey desleal.
Opinión personal:
Tengo muy buenas esperanzas con este libro puesto que la película me encantó, pero claro, es verdad eso que dicen que no hay juzgar a un libro por su película. Bueno pues, el príncipe Caspian empieza con los cuatro niños principales, Edmund, Lucy, Susan y Peter regresando a Narnia, solo que ellos no creen que lo sea. Cuando llegan al antiguo castillo de Cair Paravel, se dan cuenta de que solo quedan las ruinas de lo que un día fue una sala del trono donde ellos mismo se sentaron. El tiempo ha pasado muy despacio en la tierra, sin embargo, en Narnia han pasado más de cien años, y las cosas ya no son lo que eran.
Los cuatro reyes y reinas se enfrentan a una temible amenaza llamada rey usurpador que se proclamó a sí mismo rey de Narnia después de que los niños cruzaran a través del armario y desaparecieran del mundo mágico. La verdad es que a los narnianos les parecía como que sus reyes los habían abandonado, y a raíz de ahí, el estado de Narnia fue a peor. Las bestias dominaban el territorio, ya no se creía en la magia ni en el Aslan, el gran león era como una especie de dios supremo creador de todo aquel mundo, y lo peor de todo es que los animales habían dejado de ser parlantes.
Me ha gustado mucho este libro, aunque debo decir que algunos de los personajes se han vuelto algo raros a la hora de su relación con Narnia. Podemos ver que Lucy ha hecho nuevos amigos, que Susan se ha vuelto un poco más insoportable y que quiere acaparar toda la atención que Lucy tiene cada vez que dice que ve a Aslan y ella no lo hace; luego está Peter, que parece que se ha vuelto un poco más blando desde el libro anterior, y finalmente tenemos a Edmund, que hasta puedo decir que se ha vuelto el más gracioso de los cuatro. Y sin duda, es mi personaje favorito de este libro.
En cuanto a nuevos personajes, tenemos a nuevos animales parlantes, y a Caspian, el otro rey de Narnia, que resulta ser un poco soso y blandengue para mi gusto. En este libro, el rey descubre su pasado y de dónde proviene.
La historia termina con los cuatro niños de nuevo en la estación del metro de Londres (yo estuve allí en esa parada y es como muy woooow), ya que el tiempo no transcurre igual en el mundo de Narnia que en el mundo real. Pero contamos con que en los próximos tres libros los niños vuelvan al mundo mágico, aunque Susan y Peter ya no puedan hacerlo por ser demasiado mayores.
Nos queda Narnia para un buen rato.
Valoración:
PD: Le pongo tres estrellas, no porque no me haya gustado el libro, sino porque me esperaba muchísimo más del personaje principal del libro, Caspian, y la verdad es que me ha decepcionado bastante.
Los cuatro reyes y reinas se enfrentan a una temible amenaza llamada rey usurpador que se proclamó a sí mismo rey de Narnia después de que los niños cruzaran a través del armario y desaparecieran del mundo mágico. La verdad es que a los narnianos les parecía como que sus reyes los habían abandonado, y a raíz de ahí, el estado de Narnia fue a peor. Las bestias dominaban el territorio, ya no se creía en la magia ni en el Aslan, el gran león era como una especie de dios supremo creador de todo aquel mundo, y lo peor de todo es que los animales habían dejado de ser parlantes.
Me ha gustado mucho este libro, aunque debo decir que algunos de los personajes se han vuelto algo raros a la hora de su relación con Narnia. Podemos ver que Lucy ha hecho nuevos amigos, que Susan se ha vuelto un poco más insoportable y que quiere acaparar toda la atención que Lucy tiene cada vez que dice que ve a Aslan y ella no lo hace; luego está Peter, que parece que se ha vuelto un poco más blando desde el libro anterior, y finalmente tenemos a Edmund, que hasta puedo decir que se ha vuelto el más gracioso de los cuatro. Y sin duda, es mi personaje favorito de este libro.
En cuanto a nuevos personajes, tenemos a nuevos animales parlantes, y a Caspian, el otro rey de Narnia, que resulta ser un poco soso y blandengue para mi gusto. En este libro, el rey descubre su pasado y de dónde proviene.
La historia termina con los cuatro niños de nuevo en la estación del metro de Londres (yo estuve allí en esa parada y es como muy woooow), ya que el tiempo no transcurre igual en el mundo de Narnia que en el mundo real. Pero contamos con que en los próximos tres libros los niños vuelvan al mundo mágico, aunque Susan y Peter ya no puedan hacerlo por ser demasiado mayores.
Nos queda Narnia para un buen rato.
Valoración:
PD: Le pongo tres estrellas, no porque no me haya gustado el libro, sino porque me esperaba muchísimo más del personaje principal del libro, Caspian, y la verdad es que me ha decepcionado bastante.
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